viernes, 11 de enero de 2008


La narcoguerrilla de las FARC-EP liberan a Clara Rojas y Consuelo González

Agencias AFP, DPA, EFE, AP y REUTERS

Viernes 11 de enero de 2008


Clara Rojas y Consuelo González fueron entregadas en la selva de Colombia a una misión venezolana y de la Cruz Roja; en Caracas se reunieron con sus familiares y con Hugo Chávez; ambas estaban en aparente buen estado de salud.


CARACAS.- Finalmente, tras seis años de cautiverio y luego de una primera frustrada misión internacional, las FARC liberaron ayer a la política Clara Rojas y a la ex congresista Consuelo González de Perdomo en el sur de Colombia, donde fueron recibidas por enviados del presidente venezolano, Hugo Chávez, y el Comité Internacional de la Cruz Roja antes de ser trasladadas a Caracas. Ambas parecían estar en buen estado de salud. La liberación, la primera que realizan unilateralmente las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), buscó revitalizar el papel de Chávez en el conflicto colombiano y podría ayudar a destrabar las estancadas negociaciones de paz entre la guerrilla y Bogotá.

La misión fue ejecutada por Venezuela y la Cruz Roja en las selvas del Guaviare, luego de que Chávez recibiera sorpresivamente anteayer las coordenadas de la liberación y que el gobierno colombiano autorizara la operación.

El operativo comenzó a primera hora de la mañana. Tras ser entregadas por un grupo de las FARC, las dos liberadas agradecieron por teléfono a Chávez y luego se subieron a un helicóptero que las trasladó al aeropuerto venezolano de Santo Domingo. "No puede bajar la guardia; los que quedaron le mandan a decir eso. Mil gracias, presidente. Nos está ayudando a volver a vivir", le dijo una emocionada González a Chávez.

En Santo Domingo, bajaron abrazadas del ministro del Interior venezolano, Ramón Rodríguez Chacín, coordinador de la operación, que las condujo a un avión que rápidamente emprendió vuelo hacia Caracas, donde finalmente Rojas y González se reencontraron con sus familias, en un emotivo abrazo que pareció interminable.

"Yo quisiera recoger ya a Emmanuel", dijo Rojas en sus primeras declaraciones, en alusión al hijo que tuvo en cautiverio. Además, aseguró que desde hace tres años no tiene noticias de su ex compañera de fórmula Ingrid Betancourt, y que las FARC les entregaron pruebas de vida de 16 rehenes.

Mientras esperaba su llegada en Caracas, Chávez, que había quedado mal parado tras el fracaso de la primera misión, dijo estar listo para retomar la mediación para lograr un intercambio humanitario que fue suspendida abruptamente por su par colombiano, Alvaro Uribe, a fines de noviembre.

"Presidente [Uribe], úseme. Estoy a la orden [...]. Me monto en un helicóptero y en tres horas estoy hablando con [el líder de las FARC Manuel] Marulanda. Permítalo", reclamó Chávez. Horas después, recibió con honores a Rojas y a González en el Palacio de Miraflores. A la reunión también asistieron la senadora colombiana Piedad Córdoba y el embajador cubano en Venezuela, Germán Sánchez, quienes participaron en la misión de rescate.

El gobierno colombiano se declaró feliz por la liberación, pero pidió no olvidarse de los demás secuestrados.

"Felices porque, por fin, Clara se va a juntar con Emmanuel y Consuelo va a estar con su familia. Pero también los invito a que no perdamos la perspectiva, a que no perdamos de vista a las 43 personas que llevan hasta 10 años secuestradas y no se sabe nada de ellas", declaró el vicepresidente, Francisco Santos.

Las dramáticas imágenes de la liberación dieron la vuelta al mundo, y hubo muestras de alivio de los principales líderes internacionales: desde el presidente francés, Nicolas Sarkozy, que manifestó su alegría, hasta el mandatario norteamericano, George W. Bush, que en un gesto inédito felicitó a Chávez.

Rojas había sido secuestrada junto Betancourt en febrero de 2002, mientras que González permanecía en cautiverio desde septiembre de 2001. Ambas formaban parte del grupo de 47 rehenes que las FARC pretenden intercambiar por unos 500 guerrilleros. En total, tienen cautivas a más de 700 personas.

Las FARC habían anunciado el 18 de diciembre la liberación de las dos políticas y de Emmanuel como un gesto de "desagravio" a Chávez, luego de la suspensión de su mediación.

Tras el anuncio de las FARC, Chávez montó una misión encabezada por el ex presidente Néstor Kirchner y con delegados internacionales, que se desplazaron a la selva colombiana. Pero la misión fracasó el 31 de diciembre, luego de que las FARC se negaran a entregar a los rehenes, alegando que había operativos militares colombianos en la zona. Sin embargo, la imagen de la guerrilla y de Chávez se vio afectada cuando Uribe reveló que el verdadero motivo era que Emmanuel no estaba en poder de las FARC, sino en un hogar sustituto en Bogotá.

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